[Reseña] Las cenizas del Juramento: Una nueva oportunidad para la literatura fantástica chilena.

«Las cenizas del Juramento» es la primera entrega de una trilogía, titulada «Las memorias del Juramento». Conocí este libro en su época de promoción, poco antes de la pasada Comic Con, y a pesar de que la historia sonaba interesante, también poco novedosa. Sobretodo en un contexto donde casi simultáneamente se lanzaba un libro con un arco argumental casi idéntico por parte de otra editorial. A pesar de esto, el contexto que rodeaba el lanzamiento del libro era bastante interesante, por lo que finalmente me decidí a leerlo.

Sinopsis: En la Ciudad Alta el invierno es implacable. Su viento gélido derriba los árboles y la nieve mata hasta a los animales más fuertes. En ella vive Tahmuz, un joven huérfano cuyo misterioso protector, Doenal, se niega a revelarle los detalles de su origen y de su pasado. La pacífica vida que llevan ambos en la ciudad cambia sorpresivamente cuando toca a su puerta Tarian, un joven noble que lo único que lleva consigo es una nota escrita por su padre en la cual le explica a Doenal el riesgo que corre el chico y le suplica su protección.

Como el tiempo avanza y todo a su alrededor se vuelve amenazante, estos tres hombres emprenderán un duro viaje para resguardar sus vidas y a la vez recuperar el honor de una vieja estirpe de maestros, los guerreros del Juramento, que ahora se enfrentan a su peor enemigo: la corte de guerreros del general Galkirion y una temible Bestia asesina controlada por él.

Como en las mejores novelas de aprendizaje, Tarian y Tahmuz irán fortaleciendo su carácter gracias a la severidad y sabiduría de su protector, pero también gracias a las infinitas aventuras que les depara este maravilloso y trepidante viaje iniciático.

El autor, Joseph Michael Brennan, es un personaje interesante de por sí, licenciado y profesor de Historia, y magíster en lengua y literatura irlandesa medieval. En la actualidad, reparte su tiempo escribiendo e investigando, entre Chile e Irlanda, mientras completa su doctorado en estudios célticos, además de poseer potentes y variadas influencias familiares que van desde lo naval a la animación japonesa, elementos que se notan en la construcción de su historia, aportándole un buen desarrollo del contexto histórico necesario para este tipo de obras.

Quizás mencione en esta reseña varias cosas que ya he leído en el fanpage del autor, pero que indudablemente se cruzaron en mi cabeza mientras avanzaba mi lectura. Y es que por primera vez encontré las innumerables ventajas de leer fantasía de un autor nacional, que como chileno, también las reconoce.

Una de ellas se centra en las redes sociales, un recurso que hoy ofrece infinitas posibilidades que el autor supo aprovechar muy bien. Mi principal motivación para leer este libro nació completamente de la conexión que tiene Joseph Michael Brennan con sus lectores: por medio de su página de facebook está siempre atento a comentarios y reseñas de su libro, a dialogar y discutir con sus lectores opiniones de su escritura y otros temas de interés ñoño, a incentivar la lectura y difundir su obra de manera muy cercana, contando quién le gustaría que interpretara sus personajes si su libro fuese llevado al cine, invitando a los lectores a realizar fan arts de sus obras, compartiendo ilustraciones de los personajes, los avances de su próximo escrito, entre muchas otras cosas. Otro recurso que aprovecha mucho es su canal de Youtube, en donde comenta y profundiza sobre diversas áreas y temáticas tratadas en sus libros. Yo sin duda, como buena alma amante de los libros, quería ser parte de ese grupo de lectores que compartía con él. Poder dialogar con el autor no es una oportunidad que se presente seguido, y es una ventaja que debe ser aprovechada de este autor nacional ¡Los invito a seguirlo!

Otra ventaja es que se nota la redacción original del texto en nuestro idioma nativo, sin traducciones y adaptaciones de por medio, y eso se agradece. Ayuda mucho a visualizar y enriquecer las descripciones de escenarios, de los textos citados y de la forma en que se desarrollan algunos personajes. Recreaciones de libros leídos por Tahmuz que realmente disfruté, hasta el punto de tener ganas de leerlos yo misma.

Sus referencias son ampliamente declaradas, y tienen su huella clara en la escritura, pero de una manera sumamente positiva, enriquecen la lectura y aportan el ritmo que tanto envidiamos de la literatura extranjera. Y si bien debo reconocer que durante los primeros capítulos la lectura se me hizo algo tediosa, gracias a una presentación inicial de los personajes y la historia, a mi parecer, poco atractiva, pronto toma un ritmo que atrapa y repara todos los errores iniciales.

Me encantó la manera en la que el título del libro no se queda simplemente en la portada, si no que es un reflejo de la historia, con un significado y un peso que se va desentramando a lo largo de las páginas, y que seguramente se seguirá enriqueciendo en próximas entregas.

Una cosa más que quiero destacar es el desarrollo de los personajes, principalmente de sus protagonistas: Tahmuz y Tarian. Generalmente al leer fantasía, las hazañas de todos quienes forman parte de la aventura, a pesar de que hace poco acaban de adentrarse en un nuevo mundo, son tan asombrosas que tiendo a olvidar la edad de los protagonistas. Con este libro no me pasó. La mirada de Tahmuz y Tarian sobre su vida y los hechos es tan inocente como la de los niños que son, y madura a lo largo del libro, junto con los personajes. Esto ayuda a hacer la lectura cercana a todas las edades, además de aportarle credibilidad necesaria para sumergirnos en la lectura, sin dejar de ser literatura fantástica. También el hecho de que la historia se centre en una época y entidades que se creen ya enterradas, pero comienzan a renacer es una ayuda al lector, pues somos un compañero más en la aventura de estos dos jóvenes: Descubriendo las maravillas del aparentemente extinto Juramento, y todos los secretos en los personajes como Doenal, Remian, la Rectora Meana, y otros tantos.  Me gustó mucho el personaje de Sarya, un personaje cuyo trasfondo y origen es muy interesante de leer, y que realmente espero que tenga un papel en el mayor desarrollo de personajes femeninos prometidos por el autor para las próximas entregas.  

La estética del libro es también un punto a favor, con una ilustración de portada ad hoc y un hermoso mapa en su interior que ilustra la República de los cuatro vientos, algo muy necesario pues todo entra por la vista.

En general, y a pesar del inicio forzoso, quedé muy conforme y a gusto con la lectura de este libro, que seguramente recomendaré a mis cercanos y obviamente a ustedes. Además, deben aprovechar de que el autor se encuentra en etapa de promoción de la segunda entrega de esta trilogía: «El príncipe de los cuatro vientos», por lo que se encuentra en Chile participando de diversos eventos durante estas semanas, por si quieren acercarse a conversar o a obtener una copia firmada de alguno de sus ejemplares. Si quieren adentrarse un poco más, pueden leer el primer capítulo aquí, gracias a Me gusta leer Chile. 

Confío en que este libro será un hito importante en la apertura de oportunidades para la literatura fantástica chilena, área en la que sin duda, después de esta experiencia, seguiré buscando.