[Crítica] «El Lado Bueno de las Cosas»: El Amor Verdadero en donde menos lo Esperas

Sinopsis: Pat Solatano (Bradley Cooper) ha perdido todo: su casa, su empleo y a su esposa.   Ahora se encuentra a si mismo viviendo de vuelta con sus padres, después de pasar ocho meses en un instituto de salud mental.   Pat ahora quiere reconstruir su vida, ser y pensar positivo y conseguir nuevamente a su esposa a pesar de la difícil circunstancia que lo llevo a  su separación.   A través  de la afición familiar por el equipo de futbol Philadelphia Eagles y con la ayuda de una misteriosa chica llamada Tiffany (Jennifer Lawrence) volverá a recuperar su verdadero yo interno sin antes pasar por un duro camino donde se enfrentara a sus miedos más profundos.

David O. Russell (The Fighter) está de vuelta y llega con la adaptación de la novela de Matthew Quick: The Silver Lining Playbook.   «El Lado Bueno de las Cosas» es la historia de una batalla interna con repercusiones externas en las acciones de los personajes y la de los que los rodean, se trata de saber que está bien y que no lo está.

Bradley Cooper se luce con un personaje que desborda una angustioso encarcelamiento del que trata librarse; ¿Cómo lograrlo? el personaje de Bradley Cooper, Pat ,se las ingenia para tener siempre presente sensaciones y pensamientos limpios, positivos a pesar de su difícil situación.   Ser positivo cuesta y bastante; la película presenta el dilema de cómo superar aquello que nos agrede en nuestra propia cabeza, en nuestra propia mente y que es un recordatorio constante e infernal que no te deja librarte de él.   Y este es el tema de la película: imponerse a las dificultades y darse una segunda oportunidad.

Russell abarca y logra tratar muy bien la «resiliencia» (capacidad de las personas para sobreponerse a traumas dolorosos y condiciones de vida difíciles), con un personaje que parte de lo más bajo, y que tiene todo en su contra.  La cinta rodea esta dificultad con acercamientos de cámara y música que ambientan y representan los trastornos propios de una persona enferma que no sabe cómo conseguir poner en “Pausa” sus temores; Bradley Cooper lo representa a cabalidad, hace una introspección que destaca y hace brillar a ese personaje perdido y desorbitado que siempre busca aunque sea la mínima esperanza para aferrarse a ella.   Y creo que de eso se trata la vida ¿o no? De seguir siempre adelante, de ver las cosas siempre con un hilo de fe y esperanza, y de jamás perder esta última. El mensaje no puede ser más valioso, aun mas cuando la gran mayoría de las personas lo ve del otro modo, de la manera en que el Pat enfermo lo hace visualizar sus posibilidades y su pasado.

Otro punto fuerte es el personaje interpretado por Jennifer Lawrence (Tiffany).   La actriz realmente se desborda en un gran papel: inquieta, alocada y totalmente poco predecible. Lawrence destaca desde un comienzo con una personalidad que avisa de inmediato que cualquier cosa puede hacer y suceder.   Su «feeling» con Bradley Cooper sorprende gratamente, manejan muy bien las escenas que requieren de ese punto de conexión entre dos amantes y lo logran a la perfección en una mezcla llena de drama y comedia.

Una película perfecta para la autorreflexión, para analizar qué y cómo estamos llevando nuestra vida.   Una gran historia que nunca baja ese clímax constante que se mantiene entre la tranquilidad y locura inesperada de los protagonistas (uno de sus puntos fuertes), y que implícitamente manda el mensaje de preguntarse ¿Me estoy dando cuenta de qué es lo que tengo ante mis ojos? Véala, totalmente recomendada y además con 8 nominaciones a los OSCARS, incluida la categoría «Mejor Película».

Muy Buena.

Pedro Cereceda.