[Crítica] El Retrato de Dorian Gray: Intentando Revivir Un Clásico

El retrato de Dorian Gray, como todos sabrán, es una de las grandes obras del talentoso Oscar Wilde. En esta nueva adaptación, se nos entrega una versión alternativa de la obra, la cual intenta entregar un enfoque más oscuro y terrorífico de la historia con tal de captar al espectador de la nueva generación, que lo logre o no, es un asunto diferente.

Cuando el joven e inocente Dorian Gray (Ben Barnes) llega a Londres, debe enfrentarse a un mundo completamente diferente al que estaba acostumbrado. Aún así, gracias a su extraordinaria belleza, se le abren las puertas a variados círculos sociales, entre los cuales conoce a Henry Wotton (Colin Firth), el cual iniciará a Dorian en los placeres mundanos que ofrece la ciudad. En estos primeros momentos, Basil Hallward (Ben Chaplin), artista de sociedad y amigo de Henry, cautivado por la belleza del joven, decide retratarlo para inmortalizar su jovialidad por el resto de la eternidad.

Al ser presentado en sociedad dicho retrato, nuestro protagonista manifiesta la inquietante afirmación de que sería capaz de entregar su propia alma con tal de que su aspecto se mantenga como el del retrato. Alentado por Lord Henry, Dorian continúa y aumenta sus desenfrenos, pero mientras él sigue aparentando ser inocente y hermoso, su retrato va gradualmente volviéndose viejo y horroroso. De esta manera, antes de darse cuenta, su alma ya está corrompida y él ha perdido el rumbo en su vida. ¿Podrá Dorian Gray lograr la redención?

Como ya lo hemos mencionado, el papel protagonista recae en el joven actor Bern Barnes (Las Crónicas de Narnia: El príncipe Caspian), del cual debemos admitir que como propuesta para representar a Dorian Gray es una correcta elección, pues su rostro logra capturar la inocencia y picardía del personaje. Aún así, no es capaz de conseguir el potencial deseado, lo que no nos hace posible emocionarnos con su interpretación. Por otro lado, tenemos a Colin Firth como el otro personaje de peso, el cual con su vasta experiencia llega incluso a opacar al joven actor y entrega potencia a la adaptación, volviéndose un ente fundamental para el desarrollo de la historia.

Los primeros planos son en extremo llamativos, con interesantes y decorativos movimientos de cámara, enfoques bien desarrollados, lo que permite al espectador quedarse atento a la pantalla.

El vestuario es envidiable y bien trabajado, uno de los elementos más interesantes del film. Por desgracias, las ambientaciones del Londres Victoriano son un tanto débiles, los planos abiertos no ayudan pues revelan las deficiencias. A pesar de ello, esto cambia si se trata de espacios cerrados, ya que en ese caso, si podemos apreciar una mejor producción.

Una versión más sexual, remarcando los excesos y fetiches sin reflejar un autentica perversión o frialdad por parte del personaje, lo cual habría permitido dar ese toque de terror sicológico a la historia. El enfoque existencialista de la novela se pierde ante esta nueva propuesta, sin gran profundidad en los sentimientos e impresiones del protagonista.

Por último, debemos decir que a pesar de todo, la película funciona perfectamente para llamar la atención de los más jóvenes e incitarlos a interesarse por la historia. Además, se nos entrega un film sin complicaciones narrativas y de fácil entretenimiento.

Stephanie V.B.

IMPORTANTE

Esta película ha sido estrenada exclusivamente en el Cine “El Biógrafo” (ubicado en Barrio Lastarria), lo que le entrega una característica distintiva ya que el ambiente del cine ayuda a transportarnos al pasado y nos entrega un gusto completamente diferente y muy agradable al ver la proyección.