Descifrando: «The Leftovers»

Y si todos fuésemos testigos de un milagro, si en el mismo momento en todo el mundo se atestiguara el mismo suceso inexplicable… ¿Cómo reaccionaremos? ¿Qué haríamos? ¿Qué respuesta obtendremos? ¿A quién acudiremos? Esta y otras preguntas son las que explora «The Leftovers», serie de HBO que terminó este año y que, para mi pesar, pasó muy desapercibida para lo buena que era. Pero a pesar de ello, aquí, en Cinebooom, te invitamos a discutir un poco más en profundidad

ALERTA DE SPOILER.

Este material está pensado para leerse después de que hayas visto la serie ya que, además del alto contenido de spoiler, puede que encuentres cosas que no entiendas, ya que son referencias a la serie. Así que vete a disfrutar de esta magnífica producción y nos vemos en un par de horas.

Pero si ya la viste o simplemente quieres hacer caso omiso a mi alerta y de paso disfrutar de una grata lectura, adelante.

«The Leftovers» es una serie que para ser súper honesto es fome, no importa lo que me vengan a decir, es muy lenta y a ratos (siempre) confusa. Sin embargo, tiene algo extraño, algo misterioso que no te logra conquistar en el primer capítulo, ni en el segundo… yo diría que recién por el quinto capítulo me convenció de dedicarle tiempo, y esto ya que HBO dio una maratón en vacaciones, de lo contrario, creo que jamás le habría prestado atención. Pero insisto, jamás le recomendaría esta serie a alguien que busca acción o algo para ver al rato. Es compleja, profunda, misteriosa y lenta. Pero son estas mismas características las cuales generan el ambiente necesario para desarrollar las ideas que se plantean.

La trama se vende fácil, “qué pasaría si el 2% de la población mundial desaparece de un momento a otro”. No es una premisa nueva, ya la vimos en otras producciones, ninguna que valga la pena mencionar en verdad, pero la creación de Damon Lindelof y Tom Perrotta nos presenta la premisa jugando con el realismo mágico de manera tan bien lograda que atrapa, demora en conseguirlo, pero atrapa.

En un comienzo me costó bastante entender de qué se trataba todo, es decir, si partimos con la desaparición de tanta gente, lo que uno espera es ver una aventura sobre cómo sucedió, cómo recuperar a la gente que se fue y que vuelvan finalmente. Pero no.

En un pequeño pueblo vemos distintas historias que se cruzan, personajes atípicos y otros más normales. Hay cosas que se nos explican, pero la gran mayoría quedan en el misterio, tal vez con la promesa de explicarse más adelante. (¡POR QUÉ CARAJO LOS REMANENTES CULPABLES FUMAN! ¡O SE VISTEN DE BLANCO! ¡O HACEN TODO LO QUE HACEN! ¡Y QUE ONDA LOS PERROS!).

Todo es muy confuso en verdad, cada personaje carga su propio pesar, pero trata de seguir adelante, junto con eso, pasan cosas raras y la gente hace cosas aún más raras. Entonces pensé que todos alguna vez hemos sufrido alguna pérdida, un familiar, un amigo, un padre, el vacío que genera en uno es algo estremecedor. Pero nos las arreglamos para salir adelante, casi siempre de buena manera. Pero ¿Qué pasa si no hay razón de esa pérdida?, es decir, entendemos lo que la muerte significa (en un sentido amplio), pero cuando de un momento a otro alguien que estaba simplemente deja de estar, la sensación que se genera debe ser completamente indescriptible. Aquí se me vino a la mente los familiares de los detenidos desaparecidos, no solo aquí en Chile, sino en todo el mundo donde ha existido algún régimen similar que ha hecho desaparecer a personas sólo por pensar distinto. Gente que vive con una pena enorme y que busca respuestas. Ahora extendamos ese sentimiento a todo el mundo. En este sentido, es bastante cuerdo lo que muestra la serie, el surgimiento de organizaciones que reclaman la verdad, pero por la naturaleza del suceso, también da paso a los nuevos profetas y a nuevos cultos.

Suena loco, pero esto ya ha pasado en la historia anteriormente, pero a menor escala, es cosa de tomar cualquier escritura sagrada, no necesariamente cristiana, y nos toparemos con sociedades que vieron algo que nadie más vio y que los marcó por generaciones

Este creo que es uno de los asuntos centrales de la serie, atestiguar lo inexplicable y como vivir con ello. Por dos mil años los cristianos han vivido con la idea del regreso del mesías, esperando un milagro, ¿Cómo reaccionaremos si ese milagro sucede? ¿O si cualquier milagro sucediera?, a mi parecer, la serie lo consigue abarcar bastante bien este asunto, el desconcierto de la masa y lo torpe que puede resultar.

En la segunda temporada cambiamos radicalmente el enfoque de los sucesos, sin embargo, este ciclo resulta igual o más confuso que la primera parte (¡QUÉ ONDA LA PRIMERA ESCENA! ¡POR QUÉ TANTOS TEMBLORES! ¡POR QUE CARAJO KEVIN REVIVE A CADA RATO!, ¿CANTAR UNA CANCIÓN EN EL KARAOKE PARA REVIVIR? ¿EN SERIO? ¡NO ENTIENDO NADA!).

Pero ya entrando en el análisis, creo que la clave de esta temporada sin duda está en el nombre del pueblo/parque, “Milagro”. Mientras en todo el mundo hubo caos, en Milagro no pasó nada… y ese fue el milagro, que no pasó nada. Es un pequeño detalle en verdad pero que se resulta impresionante si observamos las magnitudes del evento. Mientras en el resto del mundo todos fueron testigos de un acto inexplicable, los verdaderos afortunados fueron aquellos que no lo atestiguan.

En este sentido resulta curioso compararlo con situaciones a lo mejor un poco más pequeñas y cercanas, como cuando ansiamos que algo pase o que no pase y si sucede o no sucede lo atribuimos a alguna intervención divina y nos sentimos de alguna forma ungidos en santidad o simplemente afortunados.

Con esto es lo mismo. Mientras todas las personas veían cambios drásticos en sus vidas, en Milagro todo siguió tal cual y eso fue un milagro.

Entonces resulta maravilloso cuando alguien que es miembro de esta comunidad ungida reclama a todos los demás que son unos idiotas por permitir que alguien degolle a una cabra en donde sea y les recalca que no tienen nada de especial, nada que los diferencie del resto del mundo y no son la tierra prometida como los creyentes del milagro piensan.

Pero reconozco que hay ideas que se plantean que aun no logro entender, así que espero en otra ocasión reflexionar sobre ellas.

Ahora, la última temporada.

Hay una broma muy buena respecto a los que han visto el anime Evangelion, “no confíes en nadie que te diga que entendió el final de Evangelion, nadie lo entiende, nadie”. Aquí pasa algo similar, aunque si hay lecturas que se pueden hacer sobre la conclusión de la serie, no creo que hay una idea final que logre abarcar todo lo que se nos quiso decir.

Así que me saltaré todo lo que no entendí (casi un 90%) a lo que a mi parecer es uno de los finales más alucinantes de la historia. Nora y Kevin se encuentran después de años de haberse separado y sólo son capaces de hablarse con la verdad luego de que Nora “cargará” con los pecados de la humanidad tras rescatar al cordero que sería sacrificado y Kevin asume todo por lo que ha tenido que pasar para llegar ahí.

Y Nora, quien logró viajar al lugar donde había ido el 2% de la población mundial, incluyendo a su esposo y marido, le cuenta que fue lo que vió, que encontró a su familia pero que con suerte fue capaz de reconocerla y que volvió. Y Kevin le cree, sin hacer más preguntas, le cree.

Se toman de las manos, nos muestran la casa y las palomas que empiezan a llegar cargadas de mensajes de amor.

Guao. Algo que jamás nos esperamos, en verdad creo que nadie fue capaz de anticipar un final tan descabellado pero a la vez tan simple y tan complejo. Me hizo recordar una película, “El hombre de la Tierra” de la cual hablaré en otra ocasión.

Haya sido por falta de presupuesto o en realidad estuvo pensado así, la escena final resulta a mi parecer maravillosa, logra capturar la esencia de la serie. No se nos da ninguna respuesta de las que en verdad queríamos en un principio, pero si se nos da respuesta sobre la vida de los personajes, sus dudas y sus miedos y cómo los superaron. El misterio inicial del “por qué” pasó a segundo plano y nos mostraron el “y ahora qué”.

De principio a fin la serie logra replantear el concepto de fe, no trata de decirnos de qué se trata ésta, sino mostrarnos cómo actúa la gente en momentos que lo único que queda es ésta. Así, nosotros mismos nos cuestionamos nuestras creencias, ya sea que reconozcamos o no la existencia de una entidad superior.

Aún me queda mucho por descubrir de ésta serie y sé que veré sus capítulos un par de veces más para entender lo más posible.

Me despido recomendándoles que si no tienen nada más que ver, denle una oportunidad a The Leftovers, tal vez les guste, aunque no se los aseguro del todo.

Mi nombre es Augusto y esto fue Descifrando, en Cinebooom