Reseña: «Te Daría El Mundo», de Jandy Nelson

Hace un tiempo pudimos leer una nota de Stephanie recomendándonos el libro “Te Daría El Mundo” (si aún no lo haces, revísala aquí ).    Pues bien, hoy vengo a contarles mi experiencia luego de leerlo.

Jandy Nelson, quien trabajó por largo tiempo como agente literario y que hace no mucho debuta como escritora (llenándose de elogios), se presenta en las librerías chilenas con su segundo libro, “TE DARÍA EL MUNDO”, obra que pasea por temáticas tan variadas como el descubrimiento y la diversidad sexual, los conflictos de la adolescencia como punto de inflexión en la vida, los dramas familiares, la traición, la pérdida y el amor.  Destacado internacionalmente y con los derechos ya adquiridos para ser llevada al cine, sin duda aparece como una lectura prometedora.

La historia habla sobre dos hermanos gemelos: Noah y Jude, quienes están muy conectados y son el punto de equilibrio en las vidas del otro. Noah es un artista innato, con un alma incontenible que solo puede ser realmente libre en sus creaciones; Jude, una joven extrovertida y de una personalidad envidiable, arriesgada y decidida. Los sucesos son relatados por Noah, quien nos interioriza en el pasado de la familia, y por Jude, quien habla desde el presente, tres años después, sobre cómo ha evolucionado lo que anteriormente supimos de boca de Noah.

Este libro me dejó realmente encantada, no tengo nada más que decir. Hace mucho tiempo no leía un libro tan rápido, haciendo espacio donde no lo había para poder abrirlo y avanzar unas cuantas páginas.  “Te daría el mundo” está lleno de matices desde el comienzo, con una forma única en su relato de transmitir los sentimientos de los personajes, no sólo a través de diálogos o reflexiones, sino que a través de todo lo que los rodea.

La narración es -a mi gusto- realmente increíble. Noah es una persona hecha de arte, que la vive y respira. Su visión del mundo se basa en como él es capaz de recrear sus vivencias gracias a su infinita creatividad, ya sea en dibujos tangibles o en las constantes obras mentales que no puede evitar imaginar. Cada vez que Noah nos habla tenemos estas “pausas” en donde se nos comparten los nombres de dichas creaciones, permitiéndonos la entrada a su “Museo Privado”. Nombres tan bien ideados que sin más información que esa, podemos hacernos espectadores de su obra.  Jude, por otro lado, es una chica totalmente deslumbrante, desde su apariencia hasta su personalidad, amante del mar (que llega a ser una extensión de su propio ser), siempre arriesgada y decidida a conseguir aquello que anhela; pero cercana, aquella chica a quien todos buscan y admiran.

Ambos crecen y cambian. Noah abandona el arte, se dedica a las fiestas, los amigos y la vida universitaria.  Se convierte en su antítesis y comienza a vivir una vida normal, alejada de todo lo que creímos eran sus más grandes sueños. Jude, en cambio, se transforma en una persona atrapada en una celda creada por ella misma, dado a las situaciones que se ha debido enfrentar  y a las decisiones que se ha visto obligada a tomar, que la han ido llevando a lugares en los que jamás pensó estar.  Personas totalmente diferentes a las que en un inicio empezábamos a conocer, pero… ¿por qué?

A medida que avanza la historia, ambos puntos de vista van convergiendo y todos los cabos sueltos del pasado y el presente se van uniendo y cobrando sentido (de donde nace mi necesidad frenética de avanzar con la lectura).

De a poco vamos llenándonos de detalles con respecto a todos esos cambios incomprensibles que se nos presentan en un inicio.   Detalles que nos permiten ir entendiendo a los personajes de una historia que, poco a poco, empieza a tomar giros inesperados… develándose secretos que jamás imaginamos.

Una historia distinta a las novelas contemporáneas de las que hemos sido testigos en el último tiempo, con personajes secundarios sumamente interesantes y protagonistas fuera de lo común, pero absolutamente asombrosos; en donde, de forma única y autónoma, colaboran en la creación de un mundo presentado a través de una narración envolvente y ágil.

Definitivamente un libro que debes hacer llegar a tus manos, y que puedes conseguir en librerías gracias a Penguin Ramdom House.    Una novela que si ya tuviste la fortuna de leer, necesitas compartir.