[Reseña]»Mamma Mia: Vamos otra vez»: El tiempo y la música lo curan todo

La inesperada pero deseada secuela del musical cinematográfico inspirado en la obra de Broadway «Mamma mia» finalmente llega a Chile. Luego de una considerable espera (el estreno internacional fue a mediados de julio), al fin podemos deleitarnos con el mágico encanto de Grecia y a la inolvidable música de Abba.

Sinopsis: ¿Qué ha ocurrido durante los últimos diez años, después de la boda de Donna (Meryl Streep) y Sam Carmichael (Pierce Brosnan)? Los personajes de la película musical Mamma Mia! (2008) vuelven a la carga con esta segunda entrega titulada Mamma Mia: Vamos otra vez, en la que también viajaremos al pasado para descubrir cómo se forjaron algunas relaciones y cómo han cambiado con el paso del tiempo.

La narración de esta entrega sucede a dos tiempos: Por una parte está Sophie, mostrándonos la inauguración de su restaurado hotel, mientras que por otro vemos a la joven Donna y el camino que la llevó a instalarse en Klokairi, la isla griega de sus sueños.

En una combinación muy inteligente de tiempos narrativos, vemos como el pasado se mezcla con el presente para presentarnos ambas historias de manera simultánea, no solo como recuerdos, sino que también como el destino que Donna forjó cuando se embarcó en esta aventura.

Siendo honesta, el comienzo me pareció un poco flojo y forzado, sin el encanto natural de la primera parte. Algunos números musicales con demasiado escenario y poca historia, y hechos que parecían ir demasiado rápido para lograr encantar al espectador, hacen que uno se remueva incómodo en el asiento los (quizás) primeros 15 minutos de la película. Por suerte, fue sólo una primera impresión, que se soluciona una vez comienza la historia de Donna y Harry. Desde ahí, la historia adquiere un ritmo mucho más orgánico, además de evocar toda la magia de la entrega anterior.

Uno de los puntos más fuertes de la cinta a mi parecer es el casting, el que sin duda estuvo cuidadosamente elegido, siendo un total acierto el grupo de jóvenes designado para interpretar a los personajes ya conocidos, logrando una similitud destacable tanto en lo físico como en lo psicológico en la mayoría de los casos. Lily James se roba la pantalla con su carisma, una joven Donna totalmente al molde de la interpretada por Meryl Streep. La participación de Cher es todo un lujo, una invitada muy ad hoc al musical.

Plagada de humor, la película sigue el estilo de su predecesora, y vemos la clara intención de emular la historia de Donna, que se encarna en Sophie de una forma mucho más segura, pero igual de plagada de sueños. Una narración un poco más difícil de articular, pero que logra con éxito guiarnos a través de lo que nos llevó a Grecia y lo que nos hará mantenernos ahí para lograr los más grandes sueños.

Sin duda «Mamma mia: Vamos otra vez» deleitará a los fanáticos de la primera parte, sabiendo rescatar éxitos ineludibles del grupo Abba, e incorporando algunos nuevos para darle otro aire a la cinta, y te mantendrá cantando y bailando hasta mucho después de salir de la sala.

Ojo que hay una escena post créditos que merece que te quedes en tu asiento hasta el final.