[Reseña] «Cómo ser Soltera»: La vida a los 30

La comedia femenina más irreverente del verano se abre paso entre broma y broma para darnos una pequeña lección de vida en los terrenos del amor.

Porque «Cómo ser Soltera» no sólo hace reír a carcajadas, también te logra emocionar e incluso reflexionar acerca de la vida amorosa de un adulto promedio que ya vive la pesadilla de los 30′. Porque ser adulto y soltero es una de las más crudas batallas a las que uno se puede enfrentar.

Sinopsis: La ciudad de Nueva York está repleta de corazones solteros en busca de la pareja ideal, y lo que Alice, Robin, Lucy, Meg, Tom y David tienen en común es que deben aprender cómo estar solteros en un mundo donde las definiciones del amor están en constante cambio.

Rebel Wilson (Pitch Perfect) se roba la pantalla con su carismático personaje; una chica soltera que solo quiere pasarlo bien, priorizando las fiestas antes que la carga de una relación.

Todo lo opuesto a Dakota Johnson (50 Sombras de Grey), quien nos hace pensar en lo patético que podemos llegar a ser cuando dependemos emocionalmente de una pareja para estar bien.

Si bien la película logra hacernos reír a carcajada limpia, al punto de hacerme botar las cabritas del cine (true story). También consigue hacernos emocionar con el lado triste de ser soltero… el miedo al compromiso, sea cual sea el motivo; un corazón dañado, un sueño idealizado del «y vivieron felices para siempre«, recomenzar una vida, o simplemente la carencia de afecto cuando se tiene todo, excepto alguien con quien compartir todo eso.

Debo confesar que mi cuerpo recibió la dosis necesaria de abdominales de tanto reír, pero pese al final » feel good movie» que tuvo la película, quede con una sensación extraña, donde los fantasmas de mis relaciones pasadas se apoderaron de mi mente para reflexionar en que etapa de  mi vida me encuentro y qué es lo que quiero en este momento… A nivel amoroso.

«Cómo ser Soltera» es una película necesaria, no solo para alegrar la tarde con una divertida comedia, sino para reflexionar y hacer un pequeño auto-análisis acerca de como vivimos nuestras vidas sentimentales…

Porque al final del día, «all you need is love».