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Ya se encuentra disponible en Netflix su película musical navideña: “Jingle Jangle: Una Mágica Navidad” (Jingle Jangle: A Christmas Journey), filme escrito y dirigido por David E. Talbert (Almost Christmas), que incluye canciones originales del cantante y productor John Legend.
Sinopsis: Una aventura musical y un espectáculo visual que dejará huella: “Jingle Jangle: Una Mágica Navidad” es un relato familiar lleno de vida y corazón. En el vibrante pueblo de Cobbleton, los inventos del legendario juguetero Jeronicus Jangle (el ganador del Óscar Forest Whitaker) despiertan fantasía y asombro. Sin embargo, cuando su aprendiz de confianza (Keegan-Michael Key) roba su más preciada creación, solo su brillante y aventurera nieta (la debutante Madalen Mills) —y un invento casi olvidado— podrán sanar viejas heridas y despertar la magia que se mantiene dormida.
La cinta nos cuenta la historia de un fabricante de juguetes e inventor, amable y feliz; que cambia su carácter cuando su aprendiz lo traiciona. No obstante, su nieta encontrará un invento olvidado, y con éste volverá a despertar la magia.
Siendo un filme musical, “Jingle Jangle” parte muy bien, con una escena donde la puesta en escena lo es todo y la canción es extremadamente pegajosa. Sin embargo, tal como ocurre con el juguetero Jeronicus Jangle (personaje interpretado por Forest Whitaker), su chispa rápidamente se apaga… y a medida que avanza el filme, la potencia de sus canciones decae, la parafernalia disminuye considerablemente, y la película termina reduciendo mucho la calidad presentada en un inicio.
Con un mensaje muy destacable, que implica creer en uno mismo y confiar en el poder de la magia interior. La película posee un lindo vestuario, escenografía y una historia muy llamativa y poderosa. Sin embargo, no logra convencer del todo, sus piezas están unidas muy ligeramente y, aunque posee un villano y una trama predeterminada, a ratos se pierde, llegando incluso a sentirse como si no contase con éstos.
En fin, cuando comencé a ver “Jingle Jangle: Una Mágica Navidad” dije: “¡wow!, que pena no estar viendo esto en el cine”; no obstante, cuando terminé quedé bastante decepcionado… al final, el filme terminó convirtiéndose en una de esas películas que tenían todo para ser buenas, pero terminan siendo “una película navideña más”.
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