[Reseña] «Johnny 100 Pesos: Capítulo 2»: Acción y romance 20 años más tarde

Tiempo estimado de lectura: 2minutos, 47segundos

En el año 1993 llegó a las salas nacionales la película “Johnny 100 pesos”, dirigida por Gustavo Graef,  la cual se convirtió en un clásico del cine chileno. Esta cinta está de regreso con una segunda parte, que posee un estilo que se aleja de la primera entrega, incursiona en diferentes temáticas y se atreve con efectos especiales.

Sinopsis: Johnny sale en libertad luego de estar 20 años en prisión, por ser partícipe de un frustrado asalto que se transformó en un escándalo mediático. El protagonista deberá enfrentarse a un mundo completamente nuevo para él, con tecnologías y formas de vivir distintas. Sin embargo, el pasado aún lo persigue, y se verá obligado a involucrase en un crimen para salvar a sus seres queridos, entre ellos su hijo, del cual no tenía conocimiento hasta salir de la cárcel.

«Johnny 100 pesos», marcó un hito al estar siete meses en cartelera y ganar reconocimientos como, el Apes a Mejor película en 1994, y Mejor película en el XVI Mystest Festival de Cine Fantástico Cattolica en Italia en 1995. Además, fue seleccionada en los premios Óscar para representar a Chile, en la categoría de Mejor película extranjera.

Al principio de la película, es interesante ver como Johnny interactúa con este Santiago moderno, ya que al estar 20 años en prisión, es como si volviera del pasado. Situaciones tan cotidianas como usar el Transantiago o un teléfono inteligente, son todo un desafío para el protagonista.

Sin embargo, esta segunda parte llega con un estilo diferente, apunta más a un cine hollywoodense, el cual no ha sido tan explorado en las producciones nacionales.

Si bien la primera entrega estaba basada en un caso real, esta secuela incursiona en los avances tecnológicos y se aleja un poco de la realidad, con un par de escenas llenas de efectos especiales que ponen en duda la credibilidad del relato.  No obstante, la acción está presente durante toda la película, tanto en peleas como aventuras en las que Johnny se ve involucrado. 

Por parte de los personajes, estos van evolucionando junto al relato, vamos conociendo sus historias y formas de actuar. Acompañando a Armando Araiza quien interpreta a Johnny, se encuentra Lucas Bolvarán como Juan, hijo del protagonista («Los 80») y Lucía Echeverría («La poseída») como Bárbara. Ambos actores se desempeñan bien en sus roles y se convierten fundamentales en la historia. 

Además, estos tres personajes relevantes se ven envueltos en situaciones amorosas, complicadas de llevar a cabo, pero ellos lo intentarán de igual manera. Por lo que, el romance no es un tópico que pasa a segundo plano en esta producción. 

Si bien en algunos momentos la historia puede parecer un poco fantástica y no convencer al espectador, logra su objetivo que es entretener al público. Además, se agradece la innovación en el cine chileno, al utilizar técnicas no tan exploradas en nuestro país. Por otra parte, la cinta se convierte en una adecuada forma de dar término (de forma ficticia) a una de las historias más conocidas de los años 90.

Sin comentarios

Deja una respuesta