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Este jueves 02 de junio se estrenó los cines de Chile “Jurassic World: Dominion”. Continuando cuatro años después de los sucesos de “Jurassic World: El Reino Caído” (2018), la tercera entrega de esta nueva franquicia (que se une con las tres anteriores: “Jurassic Park”) nos muestra un mundo bastante diferente, en el que los dinosaurios están sueltos, provocando caos y sembrando terror en todas partes.
Sinopsis: Este verano, experimenta la conclusión épica de la era Jurásica cuando dos generaciones se unen por primera vez. Chris Pratt y Bryce Dallas Howard se unen a la ganadora del Oscar® Laura Dern, Jeff Goldblum y Sam Neill en Jurassic World Dominion, una nueva aventura audaz, oportuna e impresionante que se extiende por todo el mundo.
Del arquitecto y director de Jurassic World, Colin Trevorrow, Dominion tiene lugar cuatro años después de la destrucción de Isla Nublar. Los dinosaurios ahora viven y cazan junto a los humanos en todo el mundo. Este frágil equilibrio remodelará el futuro y determinará, de una vez por todas, si los seres humanos seguirán siendo los depredadores máximos en un planeta que ahora comparten con las criaturas más temibles de la historia.
Es difícil tener expectativas con sagas que a pesar del tiempo siguen dando rodaje a nuevas producciones en el cine. “Jurassic Park” es un muy buen ejemplo de esto, siendo una franquicia exitosa, la cual fácilmente con sus tres primeras películas podría haber cerrado el ciclo y vivir eternamente en la conciencia colectiva como una historia que sorprendió y marco toda una época del séptimo arte… pero no. Se intentó continuar y revivir la magia de la trilogía original con “Jurassic World”, filme que obtuvó resultados iniciales brutales en taquilla (obteniendo importantes ingresos en sus semanas en cartelera) y que parecían darle la razón al estudio, pero dejando un gusto desabrido, menguante y bastante tibio.
En ese camino, la verdad es que “Jurassic World: Dominion” deja sentimientos encontrados. Por un lado, están las ganas de querer seguir adentrándonos en el mundo jurásico y seguirles la pista a Owen, Claire y Blue; mientras que en paralelo permanentemente está presente la pregunta: ¿era necesario seguir con otra producción? Y, siendo sinceros, la respuesta es no.
“Jurassic World: Dominion” es una buena cinta de acción: una que pareciera jamás detenerse y estar siempre en constante movimiento, entregando persistentemente estímulos con secuencias bien elaboradas y ejecutadas, a ratos adrenalínicas, que logran un ritmo bastante atractivo con la historia. Pero hay que decir que no es una buena película en su fondo, guion y en su base estructural, le falta consistencia a su guion, y se pierden sus intentos con líneas narrativas y personajes secundarios totalmente desechables e innecesarios; muchos puestos ahí con el fin de hacer encajar una trama muy poco sustentable, y que a ratos parecía algo inconexa y bastante titubeante. Lo anterior tiende a agudizarse con su duración: 2 horas con 27 minutos; una eternidad para un filme que debió rondar las 2 horas.
Sí hay que destacar el esfuerzo puesto en conectar ambas generaciones de esta gran franquicia, incorporando y dándole harto más protagonismo del que esperaba ver a los personajes de Sam Neill (Alan Grant), Laura Dern (Ellie Sattler) y Jeff Goldblum (Ian Malcom), los cuales están a la altura y otorgan esos momentos un poco mas íntimos que se necesitan en este tipo de continuaciones.
En fin, si te gusto la anterior entrega de la franquicia, probablemente disfrutarás “Jurassic World: Dominion” y no te decepcionará, pero… si en el caso contrario no te gustó, difícilmente ésta lo hará.
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