[Reseña] «Lugares Oscuros»: Libro, Expectativas y Realidad

Sinopsis: “Kinnake, Kansas, en el corazón de América, es una tranquila comunidad agrícola donde todos se conocen entre sí, van a la iglesia juntos, envejecen juntos. Pero no es inmune a los males del mundo exterior, y en las primeras horas del 3 de enero de 1985 esos males destruyeron a tres miembros de la familia Day en un río de sangre y horror.”

Gillian Flynn es una autora que se ha sabido levantar en la última década como “escritora de novelas negras”, dando así vida a aclamadas obras, como la recientemente llevada al cine: PERDIDA.   En ellas, destaca siempre el personaje femenino, pero no como solemos verlo, sino de una forma oscura, mujeres violentas, problemáticas, crueles y rotas.

“Lugares Oscuros” (Dark places) es una película homónima estrenada en el país gracias a BF Distribution, inspirada en el segundo libro de Flynn, el que cuenta la historia de Libby, la hija menor de cuatro hermanos, que con tan solo ocho años de edad, es testigo del brutal y  sangriento asesinato de su madre y sus dos hermanas. Su testimonio en contra de su hermano Ben, de 15 años, acusándolo como el autor de los hechos, termina llevándolo a la cárcel de por vida.

25 años después, habiendo agotado toda fuente de recursos y casi en la quiebra, Libby es contactada por una sociedad que se hace llamar “Kill Club”, un grupo de fanáticos de historias de crimen, convencidos con la idea de que la sentencia a su hermano y resolución del caso fue injusta y muy lejana  a lo que realmente fueron los hechos esa fatídica noche, ensuciados por el “Satanismo” que dominaba la época y los borrosos recuerdos de una niña asustada, presionada por los detectives.

Libby llama a todos aquellos recuerdos dolorosos de su pasado sus “lugares oscuros”, a los que por años se ha negado a volver. Se siente envenenada por “la sangre de los Day” y evita a toda costa ahondar en cualquier cosa que lo evidencie. Pero ve en el Kill Club la oportunidad de solucionar sus problemas financieros, y sin más opciones, accede a prestarse para su investigación a cambio de cuantiosas sumas de dinero. Quizás, después de todos estos años, la verdad emerja a la luz.

Lo cierto es que quizás el inmenso éxito de “Perdida” dejó la vara un poco alta. Esto, sumado a un gran elenco compuesto por Charlize Theron encarnando a Libby, además de Nicholas Hoult (Mad Max), Chloë Grace Moretz (Kick Ass) y Christina Hendricks (Drive), nos hace enfrentarnos con grandes expectativas a esta película.

Dirigida por el francés Gilles Paquet-Brenner, y sin contar con la participación de Flynn en el guión (a diferencia de Perdida), la cinta queda un poco corta ante el libro y las expectativas generadas.   Con una dirección que deja bastante que desear, contando con elementos poco congruentes y muchos cabos sueltos que en el libro son hilados a la perfección.   A pesar de esto, el elenco es sólido y con actuaciones destacables, lo que indiscutiblemente saca a flote al filme.

Comparándola con el libro: es digno de rescatar la fidelidad con la que el libro es llevado a la pantalla grande, detalle que a los lectores encantará.  Se mantiene la mayor cantidad posible de escenas, incluyendo muchos diálogos textuales de las páginas y la presentación de la historia a través de flashbacks de parte de los distintos personajes. Es desarrollada de manera un poco más lenta y lineal, sin ese giro totalmente inesperado en los acontecimientos que caracteriza la escritura de Flynn, pero aun así nos incita a evaluar por nosotros mismos la información entregada y a elaborar nuestras propias conclusiones.

Como uno de esos detalles imposibles de recrear en tan sólo dos horas está la profunda oscuridad de los personajes, detalles que añaden drama a la historia y que si queremos descubrir, estaremos obligados a leer el libro.

Sin llegar al asombro, “Lugares Oscuros” logra su cometido de mantenernos atentos a la pantalla y concentrados en cada uno de los sucesos; y en donde, sin compararla con “Perdida” y sin cuestionarnos mucho el desarrollo del filme… saldremos contentos de la sala.