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Tengo la manía de enfrentarme a todas estas películas, de las que nadie espera nada de ellas. La sorpresa que me llevé fue muy grata. Entro a la sala de cine y comienza «La Vache» (No se metan con mi vaca, aquí en Chile), película francesa de un hombre y su vaca en una jocosa aventura.
Sinopsis: Fatah (Fatsah Bouyahmed) es un carismático granjero que, junto a su esposa y sus dos hijas, viven en Argelia. La vida de Fatah gira en torno a su amada vaca Jacqueline, el cual sueña con llevarla al Salon de la Agricultura de Paris. Un día, luego de muchas insistentes postulaciones, logra ser invitado a esta competencia. A partir de esto, Fatah se embarca a través del Mediterráneo camino a Marsella, sólo con su vaca, para continuar su viaje a través de todo Francia tan solo a pie, con tal de llevarla a competir.
Trailer:
Dirigida por un desconocido Mohamed Hamidi, y siendo un éxito de taquilla en Francia, se nos presenta una historia llena de momentos para el recuerdo. Las personas árabes que hacen humor, siempre resultan ser muy carismáticos e inocentemente muy graciosos. Imagínense un granjero árabe, en medio de un país desarrollado, lleno de personas con una cultura muy contraria, que además se pasea con una vaca, y todo bajo un propósito tan inocente como llevarla a pie, a competir para representar a su tierra.
De partida, «La Vache» es una muy curiosa. Fui a verla sin saber nada de ella, con la mínima expectativa posible, llevándome una grata sorpresa. Por momentos me fue inevitable pensar en Mr. Bean, y su característico humor, con la gran diferencia de que Fatah es en exceso hablador y amigable, con todo aquel que se le cruza.
El humor funciona muy bien en la película, además tiene personajes muy disparejos que finalmente terminan por unirse bajo las mismas causas. Es bastante predecible en cierto punto, pero aún así entretiene bastante. Me sacó varias carcajadas, y con ganas. Tiene un humor inteligente, fuera de lo que acostumbramos y eso le hace sumar puntos. Incluso la fotografía en la película es asombrosa. Tiene una paleta de colores que demuestran lo que se quiere hacer sentir, además los paisajes de Francia siempre cautivarán al espectador.
Me agradó bastante, y creo que fue solamente por no saber nada de la película. Iba con tan pocas expectativas, que me hizo disfrutarla más aún.
Si pueden verla, háganlo. No se arrepentirán, porqué monsieur Fatah les va a sorprender en esta aventura de cómo él y su vaca se las arreglan para llegar a París con interminables problemas. Un historia donde los conceptos de familia, la cultura árabe y la interculturalidad en sí, se muestran en todo su esplendor. Recomendada.
PD: Para entender el chiste: el nombre Mohamed, es el nombre más repetido en el mundo.
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