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Ya se encuentra en cartelera de cines la gran película de acción: “Sin Tiempo Para Morir” (No Time To Die), la película N°25 de James Bond, que corresponde al final de la saga protagonizada por Daniel Craig (Entre Navajas y Secretos), compuesta por “Casino Royale” (2006), “Quantum Of Solace” (2008), “Skyfall” (2012), “Spectre” (2015) y “Sin Tiempo Para Morir” (2021).
“Sin Tiempo Para Morir” es protagonizada por Daniel Craig (Entre Navajas y Secretos), quien esta vez fue dirigido por Cary Joji Fukunaga (Beasts of No Nation, True Detective). La película también cuenta con la participación de Rami Malek (Bohemian Rhapsody), Léa Seydoux (Spectre), Lashana Lynch (Capitana Marvel), Ben Whishaw (El Perfume), Naomie Harris (Luz de Luna), Billy Magnussen (Aladdín), Ana de Armas (Blade Runner 2049), Jeffrey Wright (The Batman) y Ralph Fiennes (La Lista de Schindler).
Sinopsis: En Sin Tiempo Para Morir, Bond se ha retirado del servicio como agente activo y disfruta de una vida tranquila en Jamaica, Pero sus días de paz se ve interrumpidos cuando su viejo amigo de la CIA, Felix Leiter, aparece pidiéndole ayuda. La misión consiste en rescatar a un científico secuestrado, esto resulta mucho más complejo de lo esperado y pone a Bond tras la pista de un misterioso villano armado con una nueva y peligrosa tecnología.
Uno de los estrenos más esperados del 2021 es James Bond con “Sin Tiempo Para Morir”, un filme que se vio obligado a postergar su estreno varios meses, por los problemas asociados a la pandemia de Coronavirus y la negación de estrenarse vía streaming, tal como ocurrió con varias otras películas durante el 2020. Esta apuesta de retrasar su estreno en las salas de cine fue una maniobra que se agradece por varios motivos; en primer lugar, por la idea romántica de mantener la esencia de lo que es el cine en sí mismo: el lugar sublime para presentar este tipo de historias y grandes producciones. Y, en segundo lugar, por la diferencia sustancial de ver proyectada una cinta hecha en secuencias filmadas con cámaras de película de 65 mm IMAX, bajo una calidad y un sonido muy superior al que tendríamos en nuestros hogares.
Ahora bien, “Sin Tiempo Para Morir” es una historia bien equilibrada, que funciona de manera perfecta gracias a un guion serio y calculado, en conjunto a grandes secuencias de acción; lo que resulta en un deleite de sucesivas tomas muy al estilo “Bond”, y a lo que hemos visto en las últimas entregas del super agente del M16, sin olvidar la elegancia y tradición de este mismo, bajo parajes tan bellos como Sapri y Matera, ambas ciudades antiguas italianas.
La historia no se viene con rodeos, logrando tomar rumbo rápidamente al meollo del asunto y desarrollándose con gran desplante, abarcando los sucesos ocurridos en su antecesora “Spectre” (2015), y continuando la trama prolijamente, en esta producción donde en todo momento “el tiempo” es el personaje y el factor de cambio principal. Es este poderoso concepto el que se manifiesta a lo largo de la cinta, donde, por un lado, podemos ver a un Daniel Craig (Entre Navajas y Secretos) más experimentado, sereno y cansado; sin mucho más tiempo para seguir ejecutando este icónico papel; mientras que por otro lado, el tiempo avanza raudamente y estrepitosamente… hacia un desenlace de impacto y a la altura de la franquicia.
A su vez, la incorporación de Rami Malek (Bohemian Rhapsody) como el villano de turno es soberbia y brillante. Bajo su piel, el personaje de “Safin”, consigue lo que muchos otros no han podido reflejar: un fanático malévolo, desquiciado y sin escrúpulos, que logra poner de rodillas y en jaque a Craig y compañía. Por su parte, Ana de Armas (Blade Runner 2049), sorprende con un carismático y muy potente personaje, que se luce en una secuencia acotada, pero realmente aprovechada.
Asimismo, es necesario destacar el aporte de Hans Zimmer en la banda sonora, al igual que el de la cantante Billie Eilish, quien escribió y proporcionó el impecable tema central de la película.
En resumen, “Sin Tiempo Para Morir” es un cierre perfecto para esta historia de la franquicia, siendo una salida con bombos y platillos para Daniel Craig, quien dejará de interpretar a James Bond. ¡Una experiencia que no puedes perderte en cines!
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