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La ansiedad no da más, quedan solo minutos para ver el esperado Episodio VII, la pantalla de cine se ilumina… comienzan a proyectarse los avances de los próximos grandes estrenos, pero eso no importa, todos queremos que pasen rápidamente, queremos ver lo que estábamos esperando. De pronto, la pantalla se va a negro… comienza a sonar una melodía familiar, que hemos escuchado miles y miles de veces; es imposible que no caiga una pequeña lágrima de felicidad, ha llegado la hora de ver STAR WARS: EL DESPERTAR DE LA FUERZA.
Sinopsis: La saga de la guerra de las galaxias vuelve de nuevo y esta vez estrenando la tercera trilogía: Star Wars VII. No sabemos si podremos disfrutar de los mismos personajes, o los cambiarán, lo que sí conocemos es que contaremos con la presencia de Harrison Ford, haciendo de Han Solo. En Star Wars VI, pudimos ver como Luke Skywalker y sus amigos viajaban a Tatooine a salvar a Han Solo de las garras de Jabba El Hutt. En la película, pudimos asistir a una de las batallas más increíbles: vimos como Luke Skywalker lucha con su padre (Darth Vader) en dónde el Emperador Palpatine está en todo momento presente. Un final conmovedor y del que pensábamos todos que la historia se acababa ahí. Star Wars regresa de nuevo para sorprendernos a todos. ¿Asistiremos a la destrucción del imperio?
Para algunos Star Wars es solo otra película más (¡no saben nada!), pero para otros (entre los que me incluyo), el estreno del séptimo episodio de STAR WARS es un hito, el comienzo de una nueva época… llena de alegrías y sables de luz.
Y seamos sinceros, “El Despertar de la Fuerza” está hecha especialmente para los fanáticos. Un filme lleno de aventuras, emociones, lágrimas y risas; una cinta que funciona muy bien, con todas las generaciones. Una experiencia sin igual y que deja más que satisfechos a todos.
John Boyega es un acierto, un actor apasionado por la saga, que posee una gracia espectacular con el público y se convierte en uno de los mejores personajes de la película. Por su parte, Daisy Ridley (en el papel de Rey) es increíble, probablemente uno de los personajes más encantadores de toda la saga, con todo el poder femenino y un aura que hace imposible el no quererla; la fuerza es fuerte en ella. Mientras que Oscar Isaac (en el papel de Poe Dameron) nos deja impacientes para el próximo episodio; en realidad necesito ver más escenas con él en pantalla.
BB-8 es otra cosa, un droide imposible de amar. ¡Necesito uno para mí! Mientras que su villano, Kylo Ren, es más bien un personaje que recién está comenzando… con una historia muy interesante y que estoy seguro, sabrán aprovechar en el siguiente episodio.
J.J. Abrams no defrauda, al igual que hizo con Star Trek, el director tiene un cuidado especial con cada escena y sus significados; incluyendo una cuota de humor que no se había visto anteriormente en la saga. Es necesario mencionar que la banda sonora nuevamente está a cargo de John Williams, no puede ser de otra forma.
Pero pongámonos un poco críticos. Es que pesé a que el Episodio VII es una excelente película, tiene esos pequeños detalles que es necesario comentar…
Podemos decir que “El Despertar de la Fuerza” posee dos historias: una que nos presenta nuevas aventuras, personajes nuevos, cada uno con una historia interesante y una gracia especial; hasta ahí to do bien. Pero a su vez, tenemos una segunda historia que une a todos los personajes, ¿el problema? Su gran parecido con el guión del Episodio IV.
Por otra parte, hay una gran cantidad de nuevos personajes que pareciesen ser importantes… pero que son (literalmente) pasados a llevar, en una trama que no logra entregarnos ni siquiera el 20% de todo su potencial. Una situación que me apena ver, y realmente espero en el octavo episodio puedan enmendar los errores y potenciar como se debe a aquellos personajes.
Siendo sincero, tras ver el producto en su totalidad, estas dos situaciones se perdonan. Entregándonos finalmente una película increíble… un viaje lleno de emociones que sin duda alguna los traerá de regreso a su infancia.
Termina el “El Despertar de la Fuerza”, los aplausos son rotundos; comienzan los créditos y se prenden las luces… el público está llorando, pero no son lágrimas de tristeza, son lágrimas de felicidad. La fuerza ha despertado.
Quedan más de 500 días para el Episodio VIII, y aquí estamos… esperando.
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