Tiempo estimado de lectura: 6minutos, 29segundos
James Franco no es ajeno a Hollywood; desde sus inicios en los 90 con la serie «Freaks and Geeks« hasta su paso por la franquicia de «Spider-Man«. Franco posee una de las listas más largas de créditos en IMDB y se ha convertido en uno de los nombres con mayor peso en el mundo artístico, no solo por ser un destacado actor, sino que por ser un artista multifacético.
A mediados de los 2000 su carrera tomó un curso totalmente diferente: Franco se enlistó en un número considerable de prestigiosas Universidades para instruirse en literatura, cine y pintura. De esta manera, sus proyectos hoy en día se relacionan más con sus pasiones personales y no persiguen el éxito de taquilla, pues son principalmente producciones independientes. Ha dictado varios cursos de teatro, poesía y cine, ha escrito libros y hasta tiene una banda de música llamada “Daddy”.
Con todo este curriculum uno podría pensar ¿Qué más podría querer James Franco de la vida? La respuesta es simple, dirigir. “The Disaster Artist”, si bien no es su primera incursión en el rubro de la dirección, si supone su trabajo más arriesgado, apasionado y reconocido dentro de esta profesión.
Sinopsis: Narra la historia real de la producción de la película ‘The Room’, que ha sido considerada como “una de las peores películas de la historia». Dirigida en 2003 por Tommy Wiseau, ‘The Room’ se ha estado proyectando en salas -completamente llenas- por toda Norteamérica desde hace más de una década. ‘The Disaster Artist’ es una comedia sobre dos inadaptados en busca de un sueño. Cuando el mundo los rechaza, deciden hacer su propia película, un film maravillosamente espantoso gracias a sus momentos involuntariamente cómicos, sus tramas dispersas y sus terribles interpretaciones.
Primero debemos situarnos en 2003, cuando Tommy Wiseau dirigió, protagonizó y produjo “The Room”, catalogada como “El Ciudadano Kane” de las malas películas, una película con un guión y actuaciones tan malas que te hace cuestionar qué es lo que estás viendo a cada momento. Muchos años más tarde en 2014, Tom Bissell y Greg Sestero (coprotagonista de “The Room” e íntimo amigo de Wiseau) lanzan “The Disaster Artist: Mi Vida dentro de The Room, La Mejor Película Mala Jamás Hecha”, un libro que aborda desde una perspectiva graciosa la historia entre Wiseau y Sestero y el viaje por el cual tuvieron que atravesar para lograr el clásico del cine más bizarro de todos los tiempos.
“The Disaster Artist” dirigida, protagonizada y producida por James Franco, se basa en el libro homónimo de 2014, y déjenme decirles que no es necesario haber visto “The Room”, ni haber leído el libro de Sestero para entender o apreciar esta cinta, ya que ofrece un buen contexto para situar al espectador.
Es una comedia, pero no el tipo de comedia que esperarías de James Franco, creo que es por esta razón que destaca por sobre las demás. Al ser una película que se basa en la producción de una mala película uno esperaría que el foco cómico se encontrase allí, constantemente recalcando lo mala que es, pero la verdad es que “The Disaster Artist” no usa excesivamente ese recurso. Es más bien el personaje de Tommy Wiseau quien aporta la nota cómica cada vez que aparece en escena, y no son solo las cosas que hace o lo que dice, sino que un conjunto de ambos aspectos. Lo que genera un ambiente cómico es el personaje completo, su forma de vestir, de relacionarse con los demás y la forma de enfrentar las adversidades de la vida.
James Franco le da carisma a Tommy Wiseau y sabe diferenciar cuando este está interpretando a Johnny (su personaje en “The Room”). Aunque su interpretación no llega a ser 100% perfecta en cuanto a imitación, Franco sí realiza un buen trabajo al darle humanidad a este ser extraño que parece ser sacado de un cuento de Edgar Allan Poe.
Existe un despliegue de estrellas en la película. Hasta los papeles más pequeños delante y detrás de cámara son interpretados por rostros fácilmente reconocibles, desde Sharon Stone interpretando a la Agente de Greg Sestero, hasta Zac Efron como un actor interpretando al matón de la película “The Room”.
El cast elegido para interpretar a los actores de “The Room” es extrañamente idéntico. Los parecidos son increíbles, todos menos el de Dave Franco como Greg Sestero, pero más adelante explicaré por qué no es TAN importante. En cuanto al elenco fuera de cámaras, Seth Rogen como asistente de guión y Alison Brie como la novia de Sestero son los que más resaltan y le dan un sentimiento de realidad a la historia.
La película para mí, no solo es una película cómica sobre una mala película, pues durante las casi dos horas que dura, la comedia siempre estuvo al servicio de algo más profundo. James Franco logra crear una trama simple y directa, relacionable con el público en base a la amistad y los sueños. Es sobre cómo dos personas se encuentran en la otra y ven sus sueños reflejados y saben que no pueden lograrlos sin el otro. Es acerca de la confianza y la traición, la esperanza y la incertidumbre. Es uno de los retratos más fidedignos sobre la vida de quienes buscan su lugar en Hollywood, explora lo difícil que es el mundo del cine para aquellos que son ajenos y tienen esperanzas de hacerse un nombre dentro de la industria, todo claro, bajo el alero de la comedia.
Anteriormente mencionaba que la interpretación de Dave Franco y su parecido físico con el actor Greg Sestero no era muy precisa, pero eso no es importante, pues la química que tiene con James Franco es increíble. Naturalmente el hecho de que sean hermanos ayuda bastante a crear complicidad entre ambos personajes, además de que Wiseau ayuda y guía a Sestero durante casi toda la película, tal como lo haría un hermano mayor. Es por esta razón que finalmente me terminó gustando la interpretación de Dave Franco.
El resultado radica no solo en hacer una película sobre hacer una película, sino que en explorar minuciosamente la amistad de dos personas y lo que ambas están dispuestas a dar por mantenerla. Si Tommy Wiseau hizo “The Room” para su amigo Greg Sestero, James Franco definitivamente hizo “The Disaster Artist” para su hermano Dave Franco.
A ratos cae en sensiblerías y clichés, pero no por eso deja de ser chistosa. Nunca está demás una historia que te recuerda que la primera persona que debe creer en tus sueños eres tú, y que, si quieres algo solo debes trabajar con pasión para que suceda, al más propio estilo hollywoodense.
Al estar en plena temporada de premios, indudablemente se presenta como una de las apuestas principales dentro de las ceremonias de premiación, y lentamente está haciéndose paso a los premios Oscar.
James Franco ya ganó un Golden Globe por su interpretación en “The Disaster Artist” como Mejor Actor en una Comedia o Musical, por lo que no sería extraño que pudiera ganarse también una nominación a los Premios de la Academia, no solo como actor, sino que también como director.
Deja una respuesta