[Reseña] «Un Policía y Medio»: Duetos Memorables

El subgénero de la película «buddy cop» (amigos policías) en el mundo de la comedia es algo muy visto hoy en día, y a consecuencia de ello, es muy complicado lograr nuevas películas de ese estilo que aporten algo nuevo y que por sobre todo, funcionen y hagan reír. Esta vez, el director Rawson Marshall Thunder («Pelotas en Juego»; «¿Quién @*!#% son los Miller?») decidió unir a Dwayne «La Roca» Johnson («Súper Agente 86»; «Rápido y Furioso 5,6 y 7») y a Kevin Hart («Alquiler de Padrinos»; «Un Novato en Apuros») en una comedia de acción y espionaje. ¿Funciona o cae al mismo nivel de la fórmula promedio?

Sinopsis: La película trata sobre Calvin Joyner (Kevin Hart), un contador que está decepcionado del rumbo que tomó su vida después de haber sido el alumno con futuro más prometedor en su colegio. Un día recibe una invitación por Facebook de un ex compañero, Robbie Weirdicht, para tomar unos tragos y reunirse después de tantos años; y para la sorpresa de Calvin, el hombre que una vez conoció como una persona obesa y rara, ahora se volvió un gigante lleno de músculos con el nombre de Bob Stone (Dwayne «La Roca» Johnson). Después de tener una noche llena de confesiones de vida y recuerdos de la vida colegial, es que Calvin se ve involucrado al día siguiente en un caso de espionaje internacional a causa de su nuevo amigo, quien es en realidad un espía de la CIA que ha sido incriminado de traición a la nación. Es a partir de aquí que Calvin se embarcará en una loca aventura de la cual no quiere ser parte, con un compañero que si bien es bien intencionado, no está del todo cuerdo en sus acciones. Que comiencen las risas.

Para empezar, es válido decir que este es un género que en lo personal disfruto mucho cuando se hace bien, principalmente porque crecí viendo películas de este tipo, y con el tiempo te vas dando cuenta de que lo que realmente vende la película es la dinámica de sus protagonistas; y para serles honesto, creo que aquí hay una pareja ganadora.

Kevin Hart siempre ha sido un comediante muy chistoso cuando se trata de hacer stand-up, pero por algún motivo, siempre resulta ser bien mediocre y repetitivo cuando aparece en películas, al siempre estar gritando y alegando de lo que sucede; pero para mi sorpresa, en esta ocasión logra balancearse entre ese aspecto y el humor inteligente que lo caracteriza, mostrando así al Kevin Hart que siempre se debería ver porque es lo más chistoso que hay.    Asimismo, «La Roca» sigue aportando con el carisma tradicional de sus roles en las películas que ha hecho, y logra retratar muy bien a este personaje tan particular y tiernamente extraño.

En cuanto a la narrativa, la verdad es que la historia no tiene novedad en lo absoluto, en vista de que la historia del hombre común que es arrastrado a una experiencia increíble que le cambia la vida ha sido utilizada muchas veces en lo que es la comedia y en este caso no hay innovación en ese aspecto; sin embargo, este factor puede ser pasado por alto en gran medida a causa de la buena dinámica del dúo protagónico, quienes juegan muy bien el uno con el otro, y se nota que tienen buena química para improvisar en ciertos chistes de tanto humor físico como verbal; de tal manera que dejan a entender que estos dos son una pareja cómica de la que varios se van a acordar en su tiempo.

Asimismo, la película cuenta con 3 cameos importantes de actores reconocidos, de los cuales dos son muy buenos en su tiempo y sus referencias son muy chistosas, el tercero se siente muy innecesario cerca del final de la película.

Ahora, si tuviera algo que criticar es que no todos los chistes funcionan, ya que hay algunos que resultan muy obvios y típicos, más que nada los que son chistes muy vinculados a la linea de la historia; pero cuando son chistes de humor libre y en algunos casos de improvisación, son bastante chistosos, solo que se desearía ver más de esa consistencia en toda la película, y eso la priva de ser una comedia que es en sí memorable.

Para resumir, «Un Policía y Medio» es una comedia muy funcional que cementa toda su gracia en la dinámica de sus dos protagonistas, los cuales son lejos el factor que más se destaca y que es más memorable dentro de las parejas del género. Tan vez no la mejor comedia del mundo, pero es una buena inversión para pasarla bien en el cine.