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Cuando nos enfrentamos a «Zombieland» pocos pudieron predecir que la cinta sería una única en su clase, resultando una mezcla perfecta entre la sátira, la comedia romántica y los zombies. Una década después, su director Ruben Fleischer ha decidido reunir al elenco original para volver a darle una oportunidad a la historia de la opera prima que lo hizo saltar a la fama.
Sinopsis: Diez años después de que ‘Zombieland’ se convirtiera en un gran éxito y un clásico de culto, el reparto principal (Woody Harrelson, Jesse Eisenberg, Abigail Breslin y Emma Stone) se vuelve a unir al director Ruben Fleischer (Venom) y los guionitstas originales Rhett Reese y Paul Wernick (Deadpool) para ‘Zombieland: Tiro de Gracia’. En la secuela, escrita por Rhett Reese, Paul Wernick y Dave Callaham, a través de un divertido y loco caos que va desde la Casa Blanca al corazón del país, estos cuatro cazadores deben luchar contra nuevos tipos de zombis que han evolucionado desde la primera película, así como nuevos supervivientes humanos. Pero por encima de todo, se tendrán que enfrentar a los problemas de su alocada e improvisada familia.
El tiempo ha pasado pero poco parece cambiar: Nos volvemos a enfrentar al mismo grupo que conocimos en la primera entrega, en donde la única que parece diferente es Little Rock, quien dejó de ser pequeña hace bastante. Pese a que el tiempo parece haberse detenido, ella aún debe enfrentarse a los cambios propios del crecimiento, desafiando la autoridad que conoce en busca de su propio destino. Por su parte, Wichita y Columbus aún no logran descifrar su relación, lo que se convierte en un punto tenso entre ambos. Es así como los caminos divergen y comienza una nueva aventura, llena de comedia y zombies.
En «Tiro de Gracia» se retoma el espíritu de su antecesora y se presenta una versión mejorada de los zombies, para mostrarnos una nueva travesía del equipo que todo lo puede. El humor está a cargo principalmente de la introducción de nuevos personajes, en donde el más hilarante es sin duda Madison (interpretada por Zoey Deutch), una chica que nadie sabe como ha sobrevivido hasta este punto.
El elenco vuelve mucho más maduro, lejos de ser rostros frescos y prometedores, son actores con una carrera ya recorrida, pero son capaces de volver a encarnar sus antiguos personajes sin que estos se noten extraños o diferentes. Por otro lado, la apuesta visual y la narración en off permiten que el público se involucre y agregan una dinámica sumamente atractiva a la experiencia. La historia se aleja un poco de los zombies para centrarse en la dinámica familiar del grupo y en cómo juntos son capaces de enfrentar cada desafío que se les presenta, además que conocerse y entenderse un poco más.
Quizás lo más débil de esta cinta yace en la comparación, pues su predecesora logró ser disruptiva a un punto tal de marcar pauta en su género, mérito que esta película está lejos de igualar. Que no se malinterprete: el filme está lleno de comedia y acción, y su guión fluido y corta duración hacen que tanto los seguidores de la primera cinta como quienes se enfrentan por primera vez a Zombieland pasen un muy buen rato en el cine, pero la fórmula deja de ser nueva y no añade ningún valor a su antecesora.
Para los que ansían este regreso, la cinta tiene una escena post-créditos que rememora uno de los chistes más icónicos de la primera parte, así que quédense en sus asientos hasta el final. En cines desde el 28 de noviembre.
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