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Mientras esperamos pacientemente que la quinta entrega de Indiana Jones comience su rodaje, podemos entretenernos con una nueva cinta protagonizada por Harrison Ford. «El llamado Salvaje» está basada en el clásico de Jack London, autor de Colmillo Blanco, y se centra en la vida de un valiente y simpático can llamado Buck.
Sinopsis: Basada en la aclamada novela de Jack London, “El Llamado Salvaje” cuenta la historia de Buck, un perro vigoroso, que tras ser secuestrado es vendido como un can de trineo en los fríos páramos de Alaska durante la denominada fiebre del oro. La cinta narra la dura lucha por sobrevivir en un mundo hostil y salvaje donde Buck sufre el maltrato de los hombres y de la naturaleza misma. Gracias a su instinto, a su fuerza, y a las lecciones aprendidas, Buck consigue destacar como líder, y recuperar la confianza hacia el ser humano en manos de John Thornton (Harrison Ford).
Buck es un enorme y fuerte perro mimado acostumbrado a las comodidades. Protegido por el alero de ser el perro de un poderoso personaje del pueblo, el can suele causar caos y salirse con la suya fácilmente. Sin embargo, su vida cambia diametralmente cuando un cazafortunas pone el ojo en su físico y decide secuestrarlo para venderlo como perro de trineo. Es ahí en donde comienza un viaje en el que Buck poco a poco comienza a acercarse a su instinto más primitivo, motivado por la necesidad de sobrevivir en un mundo mucho más austero y cruel.
En el camino a su nuevo mundo, Buck conocerá a humanos que no serán tan benevolentes como su antiguo dueño, enfrentándose a la necesidad de dejar atrás sus costumbres hogareñas e inocentes, pero también descubrirá que no todos en la tierra son igual de despiadados. Sin embargo, este nuevo estilo de vida despertará en él una conexión con su pasado que lo llevará a encontrar su mejor versión en aquella que dormía profundamente dentro de él.
La película cuenta con una cuota de animación y de realismo, ya que Buck es una animación CGI hiperrealista, pero que se mantiene dentro de los estándares de lo posible al ser un perro sin voz dentro la cinta, cuyas emociones se interpretan puramente a través de la gesticulación entregada al personaje. Esto a su vez es un gran desafío, si consideramos que la historia está centrada netamente en los sentimientos del can, que a mi gusto se cumple con bastante éxito, logrando un equilibrio entre lo «live-action» y lo digital, sin intención de hacernos ignorar el trabajo detrás de Buck.
A ratos muy similar a clásicos de la infancia como «Balto» o «Colmillo Blanco» (Similaridad natural con esta última ya que vienen del mismo creador»), la película despertará la nostalgia y el amor por los canes de todos los espectadores.
Creo que la película falla un poco en centrarse en el viaje interior del perro, quitándole fuerza al omitir algunas de las partes más crudas del libro con el fin de hacerla apta para todo público y al confundir el viaje emocional al final con la su contraparte humana interpretada por Harrison Ford, quedándose en ser una emocionante adaptación de aventuras, más que una buena adaptación del clásico de London.
Sin embargo, la historia es emocionante y llamativa, con un trabajo digital muy bien logrado tanto en Buck como en los inhóspitos escenarios que nos presenta. Una buena película para ver en familia en la gran pantalla.
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