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Los Juegos del Hambre, la saga que conquistó a todos en las páginas y en la pantalla por allá por los inicios de la década de 2010, vuelve al cine para presentarnos su precuela “Los Juegos del Hambre: La Balada de Pájaros Cantores y Serpientes” (The Hunger Games: The Ballad of Songbirds and Snakes).
Ambientada 64 años antes de los sucesos ocurridos en dicha saga, la precuela, inspirada en la novela escrita por Suzanne Collins en 2020, sigue a un joven Coriolanus Snow y a unos incipientes juegos del hambre que recién comienzan a tomar forma, para mostrarnos cómo es que finalmente los destinos de ambos terminan tan estrecha y terriblemente unidos.
Sinopsis: La película sigue a un joven Coriolanus (Tom Blyth) quien es la última esperanza de su decadente linaje, la alguna vez orgullosa familia Snow, que ha caído en desgracia a los ojos del Capitolio post guerra. Con su estilo de vida amenazado, Snow es asignado a regañadientes como mentor de Lucy Gray Baird (Rachel Zegler), tributo del empobrecido Distrito 12. Pero después de que el encanto de Lucy Gray cautiva a la audiencia de Panem, Snow ve una oportunidad para cambiar el destino de ambos. Con todo por lo que ha trabajado en juego, Snow se une a Lucy Gray para cambiar las probabilidades a su favor. Luchando contra sus instintos tanto para el bien como para el mal, Snow emprende una carrera contra el tiempo para sobrevivir y revelar si finalmente se convertirá en un pájaro cantor o en una serpiente. Fuimos testigos de la caída de Snow. Ahora es tiempo de conocer su ascenso.
Sin lugar a duda el personaje del Presidente Snow es uno de los más interesantes y con más detalles por desarrollar en la saga, una oportunidad que la autora supo aprovechar para mostrarnos un muy bien acabado perfil de personaje que cobra vida en esta nueva cinta dirigida con excelencia una vez más por Francis Lawrence [quien estuvo detrás de las cámaras de “Los Juegos del Hambre 2: En Llamas” (2013), “Los Juegos del Hambre 3: Sinsajo Parte 1” (2014) y “Los Juegos del Hambre 4: Sinsajo Parte 2” (2015)]. El filme nos permite indagar en la vida temprana de este oscuro personaje, antes de convertirse en el temido y despiadado Presidente de Panem.
Un poco como un “Breaking Bad” juvenil, en esta cinta transitamos por el camino de un personaje que, pese a su origen y buenas intenciones, finalmente es guiado por su inteligencia calculadora, las escasas oportunidades de un mundo post guerra y corrompido por la sensación de poder hasta convertirse en su “peor” (moralmente hablando) versión. Todas estas transiciones son interpretadas magistralmente por Tom Blyth (The Gilded Age), quien entrega todos los matices a esta oscura metamorfosis.
Al mismo tiempo, conocemos los años iniciales de Los Juegos del Hambre, cómo éstos se van moldeando hasta transformarse en lo que ya conocíamos y el rol que toma Snow en todo este proceso, que finalmente lo llevan a ser la mente maestra a cargo de su ejecución.
Pese a desarrollarse en varios actos en donde pareciera que los primeros son los más cargados de acción, la película tiene un buen ritmo, lo que la hace entretenida y llamativa incluso para quienes se acercan a este mundo por primera vez, pues si bien el contexto el conocido, no necesitamos saber mucho más de los personajes que se nos presentan (que son en un 99% nuevos) para engancharnos de esta nueva historia.
La cinta y el guion están muy bien armados, por lo que no se siente como una sobreexplotación de la historia como muchas veces sucede en estos casos, si no en un nuevo aire que trae nuevos y atractivos detalles a esta, ya clásica, saga de la distopía juvenil. Junto con el protagónico, se nos presentan otros personajes igualmente interesantes, como Lucy Gray Baird, en el que destaca la poderosa voz y carisma de Rachel Zegler (West Side Story).
“Los Juegos del Hambre: La Balada de Pájaros Cantores y Serpientes” es una cinta atractiva, que en absoluto hace notar sus más de horas y media de duración, y que abre una nueva ventana a este mundo distópico de forma autoconclusiva (según lo referido por el propio director) para reavivar la nostalgia y al mismo tiempo disfrutar una vez más esta saga en pantalla grande.
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