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Netflix se ha convertido en un verdadero baño de sangre tras la llegada de su estreno más reciente, la serie original basada en una de las saga de terror más famosas del cine: SCREAM.
Esta serie juvenil revive el clásico de terror de los 90’ que hizo famosa a Sidney Prescott (Neve Campbell), una joven asechada por un asesino, quien la atormenta al matar uno a uno a sus amigos mientras ella intenta averiguar la identidad del enmascarado, sin morir en el intento.
Para ser honesto, Scream no me despertaba el más mínimo interés, pero luego de ver el primer episodio, es imposible no prender con ella. La serie rescata toda la esencia de las clásicas películas de terror adolescente que invadieron la pantalla grande durante la década de los 90’.
Scream posee un agradable tono irónico; un humor negro plagado de toda la cultura popular que gira en torno al cine y las series de televisión. Una producción con alma antigua, pero con un lenguaje juvenil, lleno de referencias y clichés al género (del terror), que logra adaptarse a las nuevas generaciones manteniendo su esencia casi intacta.
Si no confían en mi criterio o en la serie a simple vista, les puedo decir que el principal motivo para ver Scream, y convertirse en expertos adictos de masacres juveniles, es:
BELLA THORNE
¿Recuerdan a la pequeña niña pelirroja que protagonizaba «A Todo Ritmo», la serie de Disney?
Bella Thorne creció, desligándose por completo de su imagen de niña buena. Tras su paso por la casa de Mickey Mouse, la joven actriz ha sabido abrirse paso en la industria, con una prometedora carrera cinematográfica por delante. Con películas como The DUFF, Luna de Miel en Familia, Alexander y un día terrible, horrible, malo… ¡Muy malo!, y la próxima entrega de la saga «Amityville: The Awakening», Bella Thorne se ha convertido en una de las grandes jóvenes promesas de Hollywood.
Porque no solo es bella, también es talentosa. ¡Muy talentosa!
PERSONAJES DESECHABLES
No me mal interpreten. Los personajes no tienen nada de malo. ¡Al contrario! El elenco conformado cumple con creces las expectativas de una serie de estas características, con estereotipos típicos del terror adolescente.
Cuando hablo de desechable, me refiero a que ningún personaje es indispensable. Todos son posibles candidatos para morir en manos del misterios asesino. Así que no se encariñen mucho con los personajes, ya que siempre habrá una vacante que llenar en la morgue.
GHOSTFACE V.S. JASON
Esta nueva versión de Ghostface parece salida de una película de «Jason Voorhees» en lugar de «Scream». Lo que no deja de dar miedo. Situando los acontecimientos a orillas de un lago en Lakewood.
Esta reinvención de la mascara, se transforma en un arma de doble filo, donde puede llegar a disgustar a los fanáticos de la saga de terror, o encantar a las nuevas generaciones.
Lo más destacable de este personaje es sin duda alguna su vestimenta, la que cambia de manera radical para crear un asesino en serie más realista, mucho más cómodo para matar y menos cómico que el original. Porque el disfraz de las películas es más ad hoc a «Scary Movie» que a una saga de terror.
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Muy buena serie, esperaba semana a semana por nuevos capítulos, muchas muertes inesperadas y el fin de temporada fue excelente. Qué bueno que la renovaron, ahora a seguir esperando hasta el 2016.