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La película de Lego Batman ha sido una grata sorpresa. La comedia estadounidense dirigida por Chris McKay logra, en sus cerca de 100 minutos, contarnos una historia entretenida, sacarnos una que otra carcajada y mostrarnos a Batman como nunca antes lo habíamos visto: trabajando en equipo y contando chistes.
Sinopsis: «Con el mismo espíritu irreverente y divertido de La LEGO película (2014), este spin-off se centra en el personaje de Batman y en el universo de los superhéroes de DC Cómics, desde la óptica de la conocida empresa de juguetes. En esta ocasión, el irreverente Batman, que también tiene algo de artista frustrado, intentará salvar la ciudad de Gotham de un peligroso villano, el Joker. Pero no podrá hacerlo solo, y tendrá que aprender a trabajar con sus demás aliados.»
Dado lo complicado que se encuentra el universo cinematográfico de DC Comics, me parece un acierto tremendo haber tomado el potencial del personaje de Batman, en versión lego, y haberlo explotado en este spin-off. Se veía venir desde «La Gran Aventura Lego» que el personaje con la máscara de murciélago tenía carisma y caía bien, por lo que no es de extrañar que su película en solitario ya cuente con altas calificaciones en sitios como IMDB y Rotten Tomatoes ¿A qué otro factor se debe este súper acierto?
Desde un principio la película nos sorprende con su frenético ritmo. Va comenzando y ya tenemos a Batman haciéndonos reír a carcajadas lo que la hace empezar con el pie derecho. La historia se nos va contando de una manera rápida y entretenida, durante la cual podemos observar el gran nivel de la animación Lego y además notamos que esta película no tiene nada que ver con su antecesora. Esto al contrario de ser malo, es bastante útil, ya que nos ayuda a zanjar el tema y entender que The Lego Batman Movie tendrá su brillo propio.
Si bien, la película está destinada a un público infantil, se nota que los creadores han pensado en los nerds más adultos, ya que durante todo el film podemos ver pequeñas referencias a otras películas de Batman e incluso a personajes de Warner Bros. Esto hace que la película tenga un tono infantil, pero que sea disfrutable por grandes y chicos. Muchos de estos guiños pasan fugazmente por la pantalla, por lo que es necesario ver el filme más de una vez para poder captarlos todos. Muchos de ellos tienen que ver con otras películas de Batman, versiones del personaje y easter eggs sacados directamente de las páginas de un cómic.
El humor de la cinta otro punto muy positivo, ya que se mantiene «blanco» y logra hacer reír al público infantil, pero además de eso logra crear situaciones elaboradas o chistes más complejos para que los más adultos puedan reírse, y todo eso sin salir de la línea del humor infantil, lo que logra que los más pequeños no se sientan perdidos durante la película.
Las escenas de acción son sumamente disfrutables, ya que logran combinar lo frenético del personaje de Lego Batman con lo visualmente atrapante de una pelea «real» teniendo como resultado planos muy entretenidos, en los que el espectador (ya sea adulto o niño) disfrutará al máximo la película.
Vemos a ciudad gótica como nunca antes, ya que la re invención por parte de Lego nos otorga una perspectiva nunca antes explorada, en la que conocidos personajes adoptan las características de personajes Lego. Esto mantiene expectante a los más experimentados en el universo de DC, ya que estos durante todo el film estarán atentos a ver si su personaje favorito aparece en la película.
La película de Lego Batman no cuenta con una profundidad digna de un Oscar, pero lo cierto es que complace de muy buena manera a su público. No se trata solo de una película animada para niños, estamos frente a una producción pensada para el disfrute masivo, en donde los chicos podrán disfrutar y los más grandes tendrán la oportunidad de ser pequeños nuevamente. Lego Batman no es pretenciosa ni entreteje una compleja historia, pero logra mezclar el humor y sacar lo esencial de cada personaje de DC para crear una película comiquera y sumamente entretenida. Una cinta digna de ver en familia, en pareja o en solitario, con los cómics de Batman bajo el brazo.
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